El concepto de nacionalismo se puede definir como una ideología que va ligada a un fuerte sentimiento de pertenencia a un país, así como a su historia y a los valores que se caracterizan en su cultura. Su etimología representa este significado dentro de la raíz nasci- que en latín significa “nacer” y el sufijo –ismo, el cual quiere decir sistema o doctrina.
Tomándolo como una ideología política, el nacionalismo es la idea de que el pueblo tiene el derecho a formar su propio estado con el fin de lograr unos objetivos culturales, sociales, económicos…,que el pueblo decida de forma independiente. La base de este pensamiento es el sentimiento de la comunidad como una sola nación o patria. Esta corriente nace a partir del siglo XIX como consecuencia de la Revolución Francesa.
Tipos de nacionalismo
A lo largo de la historia, numerosos pensadores, políticos e historiadores han propuesto diferentes variables de nacionalismo, las más conocidas son las siguientes:
Nacionalismo liberal
Pensamiento que defiende la idea de que una nación surge a través del movimiento social de las personas que la forman y las obligaciones y derechos que estos proponen para lograr convivir entre ellos. Con este pensamiento surgen instituciones que regulan las leyes comunes e ideas políticas con las que cada persona, de forma individual, decide comprometerse.
Nacionalismo conservador
La idea central de este pensamiento es que cada país o nación posee una entidad en sí misma. Estos rasgos se mantienen con el paso del tiempo, aunque también evolucionan y se expresan a través de la cultura, el lenguaje, las tradiciones y el territorio que ocupa. La persona que nace y habita en este lugar pertenece al mismo de forma duradera, aunque cambie de lugar de residencia a lo largo de su vida.
Nacionalismo centrípeto
Aquel a través del que varios territorios colindantes, con distintas identidades comparten el objetivo de juntarse y formar una sola nación.
Nacionalismo centrífugo
Una fuerza ideológica que tiene como fin separar un estado en diferentes componentes territoriales. Esto se suele basar en que entre estas zonas geográficas existen diferencias culturales, históricas o lingüísticas que defienden su individualidad. A lo largo de la historia, con el interés de mejorar la calidad de vida y las peticiones de la población se han ido dividiendo territorios mediante acuerdos más o menos laboriosos.
Nacionalismo hegemónico
Aquel movimiento mediante el cual dos o más países se unifican con el objetivo de obtener más poder sobre otros territorios colindantes. Esta unión se lleva a cabo aunque los territorios que se unan no tengan una misma esencia cultural.
Nacionalismo étnico
División de naciones o territorios según las etnias de la población. Estas etnias comparten una herencia cultural común y se auto-determinan un carácter autónomo dentro de la sociedad. Los miembros de cada etnia defienden su independencia dentro de otros grupos, en base a los valores legítimos heredados de sus ancestros, de su “madre patria”.
Irredentismo
La petición de un de un pueblo que solicita un territorio ocupado por otra nación, pero que por razones históricas dice pertenecerle a él. Cuando el reclamo de dicho territorio se hace en el nombre de un imperio que en el pasado ocupó esas tierras, esta forma de nacionalismo se denomina imperialismo.
Nacionalismo marginal
Tipo de ideología muy común en las zonas fronterizas de dos naciones, en las que la población de forma ineludible tiene una mezcla cultural de ambos estados. Sin embargo, ambas partes de cada nación luchan por su territorialidad dentro de la zona. La conclusión habitual es que se comparta el “beneficio de la duda” sobre la gestión del área.
Estas franjas suelen ser un punto clave entre ambos países fronterizos, como moderadores o como puntos de tensión.