El concepto tradicional de higiene hace referencia al conjunto de conocimientos y técnicas que aplican los individuos para el control de los factores que ejercen o pueden ejercer efectos nocivos sobre su salud, sin embargo en muchos casos creemos que el término se aplica únicamente al cuidado de la salud física, sin tomar en cuenta la higiene mental como un habito que favorece la salud emocional y la calidad de vida.
Este concepto es un básico de salud emocional y de bienestar propios de una persona que tiene una filosofía positiva de la vida, se toma las cosas con sentido del humor, alimenta su mente con el placer de la lectura, pone en práctica el valor de la amistad para desconectar del estrés del trabajo, cuida su diálogo interior para que dicha comunicación con uno mismo sea amable y respetuosa.
La higiene mental, o el buen estado en relación a la salud mental, ha sido dejado de lado a lo largo de los años y relegado sobre todo por el tema del bienestar físico.
Recientemente, ha habido una apertura a divulgar y entender más los problemas psicológicos y psiquiátricos más comunes, problemas que antes quedaban destinados solo para especialistas, psiquiátricos y personas que les padecían.
Recomendaciones para mejorar la higiene mental
Afrontar las situaciones
Huir de los problemas no significa que van a desparecer, muchas veces la resolución de un conflicto depende solamente de decidirse a afrontarlo, pero eso sí no debemos intentar cambiar a los demás, es necesario concentrarse en aquellas cuestiones que están a nuestro alcance y dependen de nosotros.
Cuidar la autoestima
MuniSaludUna buena autoestima favorece para tener éxito social, académico y familiar. Es fundamental no dejarse llevar por los modelos sociales que nos hacen dudar de nuestras aptitudes y capacidades.
Expresar los sentimientos
Aprender a expresar los sentimientos en forma adecuada, contribuye con la higiene mental; es importante que las gente que está cerca de usted sepa cuando hay algo que le está molestando; guardar sentimientos de tristeza o enojo dentro de sí, consume energía adicional y puede causar problemas en las relaciones interpersonales, en el trabajo, la escuela y/o la familia.
Pensamiento positivo
Las situaciones difíciles probablemente no van a cambiar pero nosotros si podemos cambiar nuestra actitud frente a ellas. Es necesario evitar las preocupaciones excesivas y tratar de ser optimista, finalmente porque agobiarnos por aquello que no podemos cambiar.
Relaciones sociales
MuniSaludEs importante fomentar las relaciones que lo hagan sentirse bien. Los momentos que se comparten con la familia y los amigos son claves para lograr una adecuada higiene mental.
Uso del recuerdo positivo
Evitar recrear situaciones pasadas en las que experimentamos fracaso y frustración con el único fin de rememorar esas situaciones que nos hacen sentir deprimidos o angustiados; es preferible evocar los recuerdos agradables y rememorar las alegrías.
